¡Con razón los pibes no te daban bola!

Otro síntoma del viejazo es rememorar viejas épocas. Cuando ibas a bailar a matinee, eras adolescente y recién salías del cascarón. En esos días era como que vos todavía no elegías nada, pero tus viejos te hacían creer que si. Entonces, te creías mil y salías a la calle con las típicas zapatillas Topper, el flequillo Rolling Stone, el morral más sucio que habías encontrado y el pantalón hippie que comprabas en la casa hippie del barrio (valga la redundancia).

Después de tanto meditar, por fin con tus amigas lograste develar el misterio. ¡Con razón nadie te daba bola! Como en la adultez billetera mata galán, en la adolescencia la pilcha mataba chongo.

Y bue! Es lo que hay...